La calle 17 a la altura de la carrera 30 en el barrio Rebolo se ha convertido en la esquina del miedo, debido a los constantes atracos que ocurren en ese sector.

En la mencionada dirección un bus de la empresa de servicios especiales fue interceptado por cuatro hombres en dos motos quienes aprovecharon el semáforo para robar a los pasajeros.

Las víctimas eran trabajadores de la Zona Franca que habían terminado la jornada laboral, pero cuando el bus acataba la señal de tránsito, los delincuentes aprovecharon para intimidarlos con armas de fuego.

Algunos trabajadores del sector indicaron que muchas veces jóvenes de las zonas más peligrosas del barrio salen a la concurrida vía para cometer los robos por los trancones que se generan en las horas picos.

En el caso de los pasajeros del bus de servicios especiales, dos delincuentes ingresaron al bus mientras los otros dos esperaban en las motocicletas.

"Eso fue rápido, vimos que los tipos se subieron y luego se bajaron con las pertenencias y se dieron a la huida", dijo un trabajador de la zona.

Denunciaron además que el sector es tan peligroso que ocurren varios atracos a diario y la Policía no está en el lugar. Pidieron mayor presencia de los uniformados para evitar estas situaciones.

Por fortuna los pasajeros del bus no sufrieron heridas o golpes y solo se robaron sus pertenencias.